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Daazaev Saavedra Reynoso
En esta semana santa, me invitaron unos amigos, a Santa Rosa Xochiac, pueblo de la alcaldía Álvaro Obregón, ya muy cerca del desierto de los leones; la invitación tenía el fin de presenciar cómo se realizan los judas o chimos, como también les conocen. La palabra Chimo, significa, según la RAE: Molestar, fastidiar, incomodar, importunar; en este sentido se puede contextualizar por que los Judas, también se les relaciona con la palabra chimos; el vencimiento del mal, del que traiciona, el que fastidia, incomoda, por la mano de Dios.
Me llevaron a un terrenito donde al entrar, lo primero que me llamó la atención, antes de ver el chimo, fue ver banderas enormes de Argentina —¿Argentina? ¿Por qué tienen banderas de Argentina en un pueblito? ¿Qué carajos tiene que ver Argentina, con esta tradición?—, más tarde comprendería la significación.
Cada organización que participa en la elaboración de chimos, se identifica según un mote. En este caso, me enteré que se hacen llamar Argentina, ya que los fundadores tenían un equipo de futbol, que se llamaba Argentina, al decidir participar en la creación de los chimos, los identificaban como “los del Argentina”, nombre con el cual se identificaron hasta la fecha.
Esta organización cuenta con más de 20 años participando año con año, cada año existen tres hombres que reciben la batuta para coordinar la elaboración del chimo, que va desde poner la casa para la construcción, los alimentos, la bebida para todos los del grupo.
El 2024 es diferente, ya que es la primera vez que tres mujeres recibieron la batuta del chimo, hablo en específico de Ana Lilia Romero, Magdalena Velázquez, Gabriela Lara; quienes son las tres primeras, que se encargaron de la logística para que saliera el trabajo del grupo.
A partir de este año, se convertirán en pioneras de género, en tener la batuta del grupo, lo cual es apoyado por los miembros del grupo y han mostrado su apoyo, esto también convierte a todo el grupo en pioneros, en cuanto a la equidad de género, en una tradición tan hermosa y en una agrupación tan unida. Cabe mencionar que las tres mujeres son trabajadoras, esposas, madres y aun así se dieron el tiempo de coordinar por tres meses esta travesía, eso sí, en ningún momento dejaron de sonreír, de divertirse y de disfrutar cada segundo del trabajo que hacen.
Pero ¿y cómo se hacen los judas o chimos…?
Los chimos son elaborados, de una estructura de madera, carrizo que se entrelaza con hilo cáñamo, se empapela con periódico, papel craft, éste se pega con engrudo; específicamente esta agrupación hace sus modelos a escala, José Antonio Bernal, es el encargado de que las medidas concuerden y resulten en una enorme pieza de cartonería.
Una pieza de aproximadamente tres metros y medio a cuatro de altura, por un aproximado de dos metros y medio de ancho. Una vez que la estructura del judas o chimo está concluida es el turno del artista visual, Rodrigo Ramírez Bernal.
El maestro Ramírez Bernal, busca sacar el máximo provecho mediante las técnicas de la gráfica, para dar profundidades, movimientos y terminados diversos, los materiales van desde aerografía, pincel, con brocha para dar términos rústicos, esmaltes diversos. En sí, es totalmente experimental, dando resultados espectaculares a la vista; cabe mencionar que la elaboración de cada pieza va de dos a tres meses.
El viernes santo, todos los trabajos de los diferentes grupos son presentados en una plaza cercana, se presentan alrededor de 15 a 20 piezas de cartonería, posterior a esto se instalan los cuetes para ser quemado el sábado de gloria en la capilla de Santa Rosa, en el ojo de agua, a partir de las 20:00 horas, es el momento cumbre de un arte efímero que culmina con su máximo esplendor que es su destrucción: es el momento de la gloria del trabajo de tres meses mediante la fiesta pirotécnica de la purificación.
Existe mucho que escribir sobre esta hermosa tradición del pueblo de Santa Rosa Xochiac, que bien merece una declaratoria como patrimonio de la CDMX, por lo rico de la tradición, por el arte popular en su cartonería y cohetería, por los colores, olores, sabores y la experiencia. Es una tradición que seguramente se heredará por muchos años a las y los pequeños del pueblo.
Artista Plástico, Músico, Escribano y Trabajador
ghettorudeska.ds@gmail.com