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Daazaev Saavedra Reynoso
El arte y la cultura siempre han estado al servicio de los actos políticos de la humanidad, han servido para concientizar a las masas y para de una manera cómoda y estética, sea mejor la comprensión de los sucesos canónicos. Sirviéndose del índice, del icono y del símbolo, se han generado piezas que mediante el paso del tiempo dan fe de procesos políticos he históricos. Sin embargo, también están las piezas efímeras que cumplen este mismo objetivo, pero que se van después de cumplir su cometido. Este es el caso de la crónica de un títere gigante el primero de mayo y de la lucha del sindicato al que pertenezco.
Este primero de mayo, nuestro sindicato, el Sindicato Nacional de Trabajadores Unidos de Pronósticos y Lotenal (SNTUPL), salimos a manifestarnos en contra de la segregación que hemos sido víctimas, donde a pesar de tener una toma de nota, no hemos sido reconocidos por la administración en turno. Cabe mencionar que no hay fusión entre Lotenal y Pronósticos o me perdí de esa publicación en el Diario Oficial de la Federación y manejan un discurso donde que si hay fusión, que si no, que el sindicato mayoritario, minoritario, que las comisiones, que el contrato colectivo que bla, bla, bla y más bla, bla, bla…
En ese sentido, salimos las y los agremiados a este sindicato a hacer uso de nuestro derecho a manifestarnos y lo hicimos mediante la cultura, el arte y la política:
Usamos lo que culturalmente se le conoce como una mojiganga (títere gigante), que cumplió la función de un tradicional judas de semana santa, terminó hecho cenizas en la plancha del zócalo capitalino.
Artísticamente, fue fabricado mediante la cartonería, consiguiendo tres piezas en una: Un judas representado por un demonio calavera, un judas más pequeño representado por un demonio tipo alebrije y un trabajador sujetado por el cuello por el primer judas.
Políticamente, representaba el judas mayor a la administración desde el intento de fusión (que insisto, no existe); el judas pequeño a todos los aliados del patrón que fomentan este divisionismo entre Lotería Nacional y Pronósticos para la Asistencia Pública; el trabajador ahorcado, representa a todas y todos los agremiados del SNTUPL que hemos sufrido la segregación laboral, política y económica.
Mientras arribábamos con la mojiganga a la plancha del zócalo y preparábamos todo para la quema, nuestro secretario general, el Lic. Carlos Ortega Marroquín, se encontraba en el mitin junto a figuras de la política sindical como Hernandez Juárez y Gomez Urrutia, entre muchos mas compañeros y compañeras de la UNT; mientras desde la tribuna mandaban un saludo a nuestro sindicato, el judas ya se encontraba ardiendo a un costado, entre gritos y aplausos, no solo de nuestro gremio, si no de los demás contingentes que iban arribando a la plancha del zócalo. Se formó un momento eufórico.
Así quedó hecho cenizas nuestro títere gigante que fue creado con la intención de ser judas y purificar lo malo (según usos y costumbres del judas), así mismo cumplida la misión, nuestro sindicato democrático y revolucionario, se retiro con el ánimo por los cielos, la cara en alto y el deseo de seguir luchando por nuestra estabilidad ¡Que importa que seamos un sindicato de cien compañeras y compañeros!, demostramos que nuestra identidad combativa nos distingue mediante nuestras acciones revolucionarias ¡Que todos sepan lo que estamos viviendo y que sepan que no callaremos nuestro derecho de defender y alzar la voz!
¡Que viva el arte y la cultura al servicio del proletariado! ¡Que vivan los sindicatos revolucionarios de todo el mundo!
Artista Plástico, Músico, Escribano y Trabajador
ghettorudeska.ds@gmail.com