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Carlos Carral Hernández
Suena bastante bien el arranque de operaciones de la nueva Mexicana bajo el discurso de que el gobierno federal rescató la línea aérea bandera de México, pero ¿hasta dónde el enunciado en su totalidad es verdadero?.
Lo primero que hay que señalar es que efectivamente Mexicana de Aviación será desde su arranque la aerolínea bandera de México, no existe otra y aunque Aeroméxico lo fue en su momento y lleve incluso al día de hoy el nombre de nuestro país en el suyo, considerando las circunstancias actuales de esta empresa en cuanto a su capital se refiere, sus alianzas estratégicas y su próxima salida a bolsa en Estados Unidos, creo que lo correcto es que esta empresa modificara su nombre y se llamara AeroUsa.
Sin una idea nacionalista, creo que todos los países deben procurar la existencia de una aerolínea bandera, incluso creo que ese hecho y su preponderancia en parte de las rutas existentes, dinamizaría la competencia en relación a las empresas que basan su estrategia comercial en una visión más global, así es que es un acierto que México de nueva cuenta tenga una aerolínea representativa del país.
Un error en el inicio de operaciones de la “nueva” Mexicana de Aviación, es pensar que el gobierno rescató a la vieja empresa, esa que está en concurso mercantil, con una larga lista de acreedores entre ellos sus trabajadores, a los que difícilmente se les cubrirá lo que por ley les podría corresponder y como ocurre en los juicios en los que se declara judicialmente la quiebra y extinción de una empresa: se cubrirán obligaciones en orden de preferencia, hasta donde den los bienes y derechos de la misma.
Para que la empresa fuera rescatada, el gobierno la debió adquirir a través de la inversión de nuevo capital, reconocer y pagar sus deudas, reestructurar su capital social y desde luego poner en marcha un plan empresarial para comenzar operaciones, lo que no ocurrió de ninguna manera.
Entonces, ¿cómo está operando mexicana de aviación sin ser reestructurada?, bueno, esto es como Coca Cola y FEMSA, ésta última la empresa que explota en México a la marca refresquera, es decir, una cosa es la empresa y otra la marca, al grado de que en algún momento pudiera aparecer una empresa con el nombre que podamos imaginar y empezar a explotar la marca Coca Cola y nada tener que ver con FEMSA.
La marca comercial Mexicana fue adquirida por el gobierno de la república, la empresa Compañía Mexicana de Aviación S.A. de C.V. sigue en concurso mercantil y sin ninguna probabilidad de ser saneada y volver a operar, de hecho el pronóstico que se ha hecho en diferentes círculos, es que en algún momento de 2024 el Juzgado de Distrito en materia de concursos mercantiles que conoce del procedimiento en contra de la empresa, declarará la extinción formal y definitiva de la empresa y con ello terminada la relación entre la misma, sus acreedores, pero sobre todo los trabajadores que laboraron para ella.
Detrás del arranque de la Mexicana de la 4T, la que es operada por la empresa de participación estatal creada en el 2023 y denominada Aerolínea del Estado Mexicano S.A. de C.V., está la compra de la marca por el gobierno y la posible compra de algunos inmuebles que hasta este momento son propiedad de Compañía Mexicana de Aviación S.A. de C.V., compras que si bien representan más de 800 millones de pesos, repartido entre poco más de 6500 trabajadores con derecho a participar del producto de las operaciones, representa realmente que los trabajadores reciban cerca del 5% de lo que por ley les corresponde, sin la posibilidad de que en algún momento les cubran lo que resta.
Es genial que se ponga en operación a una aerolínea emblema para el país, pero también seamos claros, con la operación se desvanece toda esperanza de los trabajadores de recibir lo que el Grupo Posadas de Gastón Azcárraga evitó cubrirles al vender sin ninguna vigilancia gubernamental su participación accionaria a Tenedora K, operación fraudulenta con la que dejaron a esas 6500 familias con una mano adelante y otra atrás, también de un día para otro.
En resumen, el gobierno fundó una empresa que ensalsará el sentimiento nacionalista, pero de ninguna manera ha rescatado y saneado a Mexicana de Aviación, así es que lo que ha salvaguardado es su interés por generar un episodio emotivo en la sociedad, pero nuevamente a cargo de los derechos de los trabajadores.
ADDENDA
1. A partir de este momento relanzamos nuestro sitio www.dignidad.mx, la que tuvimos abandonada cerca de 4 o 5 meses, afortunadamente no por falta de ánimos e incluso posibilidades, sino por la carga excesiva de trabajo de las manos que tenemos alguna participación en ella.
Deseamos que esta etapa que buscamos alcanzar, detone el interés de otras plumas que quieran hablar de su verdad o punto de vista sobre cualquier tema que consideren de interés general, pero sobre todo su compromiso en hacerlo regularmente, algo de lo que nuestra sociedad adolece hoy en día terriblemente.
2. Otra huelga más en el mundo, lamentablemente no en México. Ahora tocó el turno a la Torre Eiffel; los trabajadores que laboran en ella, convocaron a un paro como manifestación en el marco del centenario de la muerte del Ingeniero Gustave Eiffel, quien diseño y construyó la torre. Los Huelguistas denuncian políticas insostenibles de parte de la actual administración de este polo de atracción, todas ellas también en mucho a cargo de los derechos de los trabajadores.
Nuevamente ojalá este tipo de acciones, luchas y hechos, motiven a los dirigentes sindicales mexicanos a dejar su política dócil frente al gobierno, clientelar ante sus representados y corrupta frente al dinero, a todos, a los del viejo sindicalismo y a los que se dicen ser parte del nuevo sindicalismo que ahora se quiere subir al sindicalismo del Siglo XXI, que no son capaces cuando menos de definir.
carralhernandez@gmail.com
www.facebook.com/carloscarral2022
Abogado Postulante y miembro de la Escuela para la Formación Política y Sindical A.C.
